Una historia que no me ha dado miedo, aunque sea de terror, pero si me ha tenido enganchada. Todo empieza como muchas novelas de terror, un nuevo destino, una mudanza y, en este caso, un pueblo, Ravenheart, muy particular. La población no quiere salir de allí, o eso parece, no cuento más. Me quedo con la protagonista, Faith, su nombre es muy acertado y me gusta su rebeldía. La novela es muy entretenida, la recomiendo.
|