Buñuel en el laberinto de las tortugas

Tras el fracaso de sus dos primeras películas en París (Un perro andaluz y la edad de oro) y después de una noche animada y festiva en la capital francesa con su buen amigo Ramón Acín, Buñuel se plantea la realización de un documental sobre una zona paupérrima de Extremadura, las Hurdes. El principal escollo para llevar a cabo esta empresa es la falta de liquidez del cineasta, motivo por el cual Acín le responde sonriendo que si le toca la lotería, él financiará el documental.

al cabo de unos meses, Buñuel recibe una llamada desde España de su amigo comunicándole que le ha tocado la lotería de Navidad y que no olvida su promesa. Este fue el punto de inicio para afrontar el rodaje de "Las Hurdes, tierra sin pan" donde el objetivo es mostrar las pésimas condiciones de supervivencia en una zona con una belleza salvaje pero con recursos muy limitados.

El equipo de rodaje se compondrá del propio Buñuel, Acín y dos colaboradores franceses que tratan de sacar adelante el documental con unos medios excasos y con algún toque extravagante y surrealista muy propio del director aragonés. El rodaje durará un mes y se dará por finalizado en Mayo de 1933.

También se reflejan los miedos y fobias de Buñuel a través de los sueños, como el pánico a las gallinas y el temor a las opiniones de su padre, que continúa apareciendo en sus pesadillas.

Me han gustado las ilustraciones de Fermin Solís, que para esta tercera edición ha decidido añadir el color, aunque después de ver la versión para cine, considero que se queda un poco abreviado y falto de algo más de profundidad, aunque cumple con el objetivo de presentarnos las extremas condiciones del lugar y alguno de los rasgos que definían la personalidad de Buñuel.

Lamentable la circunstancia del asesinato de Ramón Acín y su mujer al inicio del golpe militar de 1936 por miembros de extrema derecha.