En esta historia escribe Andrea. Habla Andrea. De su infancia y de su presente. De lo que la marcó, la marca y marca a quienes la rodean. Dolorosa, cercana, entreverada con relatos, nos muestra las cicatrices de callar. Habla de personas que la mayor parte del tiempo son invisibles y de cómo lo invisible (que marca más que el cuerpo) se revela y se rebela. |