NOCTE

Y se rompió el cielo en dos
Drew Brewer siempre ha tenido una vida tranquila. Él y su mujer disfrutan de la vida en el campo, de la calma y de lo cotidiano. Sin embargo, una mañana el señor Brewer se despierta y encuentra a su perro inquieto; la razón, una especie de arco de electricidad que hace de portal a otro lugar, uno que no se puede concebir. Las alertas suenan en el equipo de inteligencia británico y Tom Hoult acude al lugar, lo que contempla le hace decidirse. Así entra en la investigación la doctora Lalasa Kapoor, sensitiva, y se funda la agencia Nocte.
Este hecho insólito será llamado Overture y será el punto de partida de esta novela de ciencia ficción a la que le falta muy poco, bajo mi punto de vista, para ser una distopía. Con tintes de Expediente X y La cúpula la obra nos plantea un hecho insólito, como es un portal a otro lugar, que aparece de la nada, pero que tiene repercusiones más allá de las obvias, ser un fenómeno no explicado.
La inteligencia británica pronto se pondrá manos a la obra y, de esta manera, lo que nos ofrece el autor es la investigación años después del suceso que los gobiernos están haciendo del mismo. Para ello, se nos ofrecen las declaraciones ante el juez de los principales responsables Tom Hoult y, en mayor medida, Lalasa Kapoor, fundadores de Nocte; e informes con declaraciones de testigos (trabajadores de las diferentes sedes de la agencia).
Esta investigación nos lleva no solo al primer momento de la anomalía, el Overture, sino también a su gran momento de crisis e, incluso, a la indagación de la gran pregunta: ¿qué es el Overture? Los personajes, por tanto, serán los que nos den respuesta a estas cuestiones a través de sus declaraciones, pero también a través de sus emociones e hipótesis, ya que el fenómeno oculta algo en su interior que revolucionará concepción de la vida de cada uno de ellos.
Trascendente narrativo
Así, a lo largo de la trama las preguntas asediarán al lector, que no podrá dejar de preguntarse cómo, por qué y qué. Justo en ese orden, ya que lo curioso de la obra es que refleja muy bien cómo los personajes necesitan aprehender lo inmediato para siquiera poder concebirlo.
En este sentido, se mantiene el punto de indeterminación durante toda la obra, lo que quiere saber el lector también lo quieren saber los personajes y avanzan a la vez. Las conclusiones a las que estos van llegando se nos narran con una comprensión perfecta, pero no son cosas obvias que el lector pueda adivinar; gracias a eso, el lector queda enganchado a la obra, a pesar de que no sepa cuál es el objeto de estudio…, porque ni ellos mismos lo saben.
Para que todo esto sea efectivo, el autor le ha dado una ambientación muy concreta, los temibles años 70 donde la modernidad, lo antiguo y lo supersticioso convivían en un equilibrio peligroso. A mí particularmente, todo ese aura me ha recordado mucho a Expediente X, ya que los investigadores son conscientes de que están tratando con algo que se escapa a su entendimiento, pero tienen la sensación de que no es algo «mágico» o «mítico», sino algo para lo que aún no están preparados. Ese enfrentarse a lo desconocido de cara y sin atarse a supersticiones nos permite que tengamos una narración sobre lo insólito de lo insólito.
Calidad en la dificultad
Y hay que reconocer que el tema de la obra, aunque parece sencillo, ¿qué es el Overture?, esconde una dificultad bastante alta (¿cómo?, ¿por qué?, ¿por qué a nosotros?, etc.) y, sin embargo, es una obra que se lee bastante bien.
El estilo del autor lo permite, no se mete en discusiones conceptuales interminables, los asuntos científicos son explicados de una manera clara y sencilla, las discusiones sobre la transcendencia parte de un punto común que tanto personajes como lector entendemos. Para ello, el estilo es directo, fluido y concreto, lo que facilita no solo la comprensión, como comentaba antes, sino también el ritmo de lectura y la tensión en la trama.
Todo por descubrir
Es verdad que este ha sido mi primer libro del autor, pero no creo que sea el último. Es cierto que a sus series Z no me meteré porque es un tema que me da mucha pereza, pero sí en aquellos que tenga de otros géneros.
Nocte es una obra que he disfrutado en todos sus aspectos: la ambientación, la indeterminación del objeto, cómo son sus personajes (especiales, complejos y originales) y los temas tratados. La recomiendo porque creo que aquellos que gusten de esa ciencia ficción más de especulación, de reflexión encontrarán en esta obra un remanso en el que disfrutar. de verdad, espero que os animéis con ella.
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