Ha pasado un año desde la vuelta de Miquel a Barcelona, todo parece ir bien, comparte su vida con Patro y gracias al último caso no tienen problemas económicos, pero en esos años de dictadura la dicha nunca dura, tras la visita y encargo de un hombre peligroso tiene que comenzar a investigar para encontrar un cadáver del pasado. No pierde interés esta tercera novela protagonizada por Miquel Mascarell, de momento lo voy a dejar aquí a pesar de que todavía me quedan 9 novelas ( y otra en ciernes) pero estoy seguro que volveré, y es que el inspector Mascarell merece pasar a la historia como uno de los iconos de la literatura policiaca.
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