El movimiento del cuerpo a través del espacio

Llevas toda la vida corriendo por placer, una actividad que deja indiferente a tu pareja. Y, justo cuando una enfermedad te impide seguir haciendo ejercicio, esta decide que quiere correr una maratón. ¿Cómo te sentirías? Este es el punto de partida de 'El movimiento del cuerpo a través del espacio', de Lionel Shriver.

Es el segundo título que leo de la autora, que me había conquistado con el libro de relatos 'Propiedad privada'. En su nueva novela vuelve a demostrar lo que mejor se le da: la construcción de personajes a quienes va empujando hasta llevarlos al límite y volverlos histriónicos, con diálogos audaces, afilados, de un humor incisivo que le saca punta a todo. Los protagonistas, Serenata y Remington, son tan insufribles y carismáticos que quisieras tenerlos en tu vida por las anécdotas.

'El movimiento...' es una crítica feroz al culto al cuerpo llevado al extremo. ¿Quién no tiene alguien en su círculo que haya sucumbido a la secta del crossfit? Shriver analiza el funcionamiento de estos grupos que funcionan casi como cultos, con líderes fuertes, carácter dogmático e incluso señalamiento a quienes no se suman. Sus propios miembros, si no son capaces de completar las competiciones que organizan, son tachados de débiles, vilipendiados a degüello y renegados.

Pero además explora otro tema de gran interés, el de la corrección política y la tensión racial. Remington se vuelve un obseso del deporte tras una prejubilación forzosa a raíz de un conflicto con su nueva jefa, negra y bastante más joven que él. Y Serenata, profesional de doblaje caracterizada por su gran capacidad para imitar acentos (fruto de una infancia itinerante), va perdiendo trabajos por la concienciación social que despertó el infame homicidio de George Floyd en su sector.

Una lectura muy ágil, amena (no he hablado de la tercera persona en discordia que pondrá el matrimonio en un aprieto 👀) y que abre debates muy interesantes.