Es una historia preciosa que trata temas muy duros desde un prisma respetuoso, muy emocional y con una gran superación personal de los personajes.Narrado en dos voces, tenemos capítulos relatados por Mandy, una chica soñadora y luchadora, con una gran familia que la apoya incondicionalmente y otros capítulos contados por Joel, un chico muy especial que, a pesar de los problemas que tiene con su madre, y sus terribles circunstancias, no es un personaje oscuro, sino que es super dulce y te llega desde el principio al corazón. Un grave suceso hace que sus caminos se separen durante siete años. Un periodo en el que ambos crecerán echándose de menos. Un nuevo hecho hace que se vuelvan a encontrar. Su relación va forjándose muy poquito a poco, es bonita y creíble, y vamos conociendo qué fue lo que le pasó a Joel tanto en su infancia como aquello que le hizo alejarse. El resto de personajes complementan muy bien la historia. Tanto Leo, el hermano de Mandy, como sus padres, y sus amigos te dejan con ganas de saber más de ellos. |