Lectura muy simple, ligera, con mucho diálogo y ambientada en los años 60, que no llega a las 200 páginas, por lo que la lees en una tarde. Me sorprende que la vendan como la gran historia de amor, que si tienes que leer una sola novela de amor en tu vida sea “Love story”, todo un clásico, porque no remueve ni cala pese a lo trágica que es. Empieza bien. Desde el principio, sabemos que Jenny muere y es Oliver quien cuenta su historia, pero todo ocurre tan rápido, tan precipitadamente y sin entretenerse en florituras, que, al menos en mi caso, no he llegado a conectar. En mi opinión nada memorable, esperaba mucho más. |