El lector fiel

¿Qué vamos a encontrar en esta novela? Viajaremos a Finlandia para adentrarnos en un thriller nórdico de lo más adictivo.

Jessica Niemi es una inspectora de policía que se ve en la tesitura de investigar una serie de crímenes, a la vez que hace frente a su oscuro pasado y una vida que trata de ocultar a sus compañeros.

Lo que Max Seeck nos ofrece en esta novela es una historia más profunda de lo que parece, con una trama que se va complicando más y más, y que hace al lector pensar en cientos de posibles desenlaces.

Con cada giro de la trama, no solo descartamos sospechosos, sino que vamos encontrando un trasfondo cada vez más oscuro, viendo la peor parte de la humanidad.

Con una prosa bien cuidada, El lector fiel es una lectura que se disfruta de principio a fin y que aborda diferentes temáticas.

Si la trama principal es la que envuelve a los asesinatos que se van produciendo, hay una trama secundaria y varias subtramas que merece la pena mencionar.

Por una parte, tenemos el pasado de Jessica. Un misterio que poco a poco se irá resolviendo. Tanto el accidente que sufrió de niña, como el punto clave vivido en Venecia a los diecinueve años. Ambos momentos la llevaron a convertirse en la mujer que es a día de hoy y resultan de vital importancia para la trama principal.

Las subtramas que se centran en los personajes secundarios servirán para abordar distintos temas de índole social, pero también como descanso a la tensión que se acumula en los demás capítulos.

Aunque la narración muestre temas que no parecen conectados con la trama, Max Seeck logra unirlos en un todo que se completa solo si se presta atención a cada detalle (cuidado si sois de los que leéis en diagonal u obviáis la narración para acudir a los diálogos).

Aunque haya momentos con una narración más lenta y que parecen sacar al lector de la historia, al final todo es importante y el autor logra dar tales giros que atrapa al lector en las subtramas por completo.


Mensaje de la novela: Aunque nos encontramos ante un thriller, sí hay varios mensajes en la novela que dan qué pensar.

Por una parte, se aprecia la presencia del narcisismo extremo en algunos de los personajes.

También se aprecian diferentes relaciones tóxicas a lo largo de la novela, y la importancia de saber qué espera cada uno y qué está dispuesto a dar en una relación.

La vida y la muerte van muy de la mano, no solo por los asesinatos, sino por diferentes momentos que nos hacen ver que, por muy inmortales que podamos sentirnos en algún momento, la vida siempre acaba.
Pero esto no es algo negativo, sino algo inevitable. Aceptar que somos mortales y que, disfrutando de cada momento y tratando de aprender y mejorar, podremos marcharnos de este mundo sintiéndonos plenos y satisfechos.

Y, por supuesto, la importancia de la salud mental.


Personajes: Los personajes en esta novela resultan muy complejos, enrevesados y bien construidos.

Me ha sorprendido cómo se capta la esencia y personalidad de cada uno de ellos con una facilidad pasmosa, como si les conociera de antes.

Cada detalle está tan bien cuidado que da gusto leer la obra y acompañar a los personajes en su aventura.

Jessica Niemi, de la que ya he hablado antes brevemente, es la protagonista de esta novela, pero nunca está sola: Erne, su jefe, trata de ayudarla y cuidar de ella en todo momento.

Jessica es una joven en la treintena, que vive sola porque trata de ocultar a todo el mundo la verdad sobre su familia.
Esta barrera que ella se crea la aleja de todos y la condena a mantener relaciones superficiales con todos salvo con Erne, al que quiere como a un padre.

Erne, jefe de Jessica y la unidad que ella lidera, es un hombre enfermo que trata de mantenerse entero de cara a los demás. Sabe que le ocurre algo, pero no hasta qué punto le afectará en su futuro.
Es un jefe cercano y carismático, que sabe escuchar a sus subordinados y sacar lo mejor de ellos, aunque a veces necesite jugar la baza de la jerarquía de mando.

Mikael, Nina, Rasmus y Jufuf son los compañeros de Jessica. Con ellos tratará de dilucidar la verdad y, sin saberlo, encontrarse a sí misma y hacer las paces con su pasado.


Lo que más me ha gustado: La trama de la novela, así como los giros inesperados que iba dando.

La forma en la que el autor cuenta la historia y poco a poco va atrapando al lector entre las redes de una historia cuyos hilos cose un todo inesperado pero con sentido.

La construcción de los personajes y sus personalidades dispares.

La forma en la que Max Seeck relata las relaciones entre compañeros, que no siempre son las más agradables.

Las trazas de realismo dentro de una historia de ficción.

La originalidad de la novela, tan complicada en un mundo en el que ya hemos visto de todo.

Y, por supuesto, la pluma del autor. Un estilo personal y diferenciado que me hace querer leer más de Max Seeck.


Lo que menos me ha gustado: Algunos puntos de la trama que me resultaban más lentos y a los que no veía relación, aunque luego encajaban a la perfección y resultaban necesarios.

El confuso desenlace (al menos para mí). No termino de entender si es un final cerrado o abierto a una continuación, que sería perfectamente plausible.


Conclusión: He tenido la suerte de topar de nuevo con uno de esos thrillers que me hacen querer leer más y más, recordándome por qué me gusta tanto este género.

Que haya profundidad en la novela y no solo se centre en los crímenes es un plus añadido que la dota de encanto y que me ha hecho disfrutarla más aún.

Sin duda recomiendo su lectura, especialmente a amantes del género, a aquellos que pasen por un bloqueo lector o a quienes quieran comenzar a adentrarse en el mundo del thriller.
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