Antes de meterme en harina, quiero agradecer a @Babelio y a #MasaCrítica la oportunidad que me han dado de leer este libro. Además de dar mi enhorabuena a su autor, Jens Schumacher y al ilustrador, Thorsten Berger. Empezaré con la descripción física. "El libro maldito, ¡Déjame salir!" tiene un tamaño adecuado para las manos de un niño, de pastas duras y páginas satinadas. La letra, aunque a veces me ha resultado un poco pequeña se lee bien, y tiene unas ilustraciones maravillosas con un colorido muy atrayente. Se trata de una historia que hace partícipe al lector sí o sí, ya que el futuro del protagonista está a merced de la decisión que tomemos. Es de esos libros en los que tienes que elegir un camino, dependiendo de lo cual, irás a una página u otra. Pero no solo eso, hay otro tipo de juegos: laberinto, sílabas desordenadas, contar objetos... Un libro muy entretenido, que puede hacer que los niños (y los no tan niños) se "enganchen" a la lectura en general, y a este libro en particular. Tiene dos finales: uno más o menos predecible aunque un poco bruto, y el otro para nada predecible. No voy a contar nada de la historia para no hacer spoiler. Solo digo que a mí me ha gustado muchísimo, y que lo recomiendo sin ninguna duda. Después de acabarlo se lo di a mi hija (11 años, lectora empedernida) para que lo leyera. Lo "devoró". Aquí os dejo su opinión: "el libro es muy divertido. Nunca me lo había pasado tan bien leyendo un libro. Me encanta el poder elegir cómo procederá la historia, y la verdad es que me lo leería otra vez solo para reirme más con "el maldito libro". |