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Cuando decidí leer este libro sabía que sería una despedida. Conocería el final de la “era dos” de los nacidos de la bruma, pero también diría adiós a unos personajes que con el tiempo llegué a querer. 😔 Era un paso difícil de dar, pero tenía que hacerlo. Desde el inicio Sanderson me recibió con un relato ágil y muy adictivo. En pocas páginas olvidé mis preocupaciones, sumándome a la aventura de mis queridos protagonistas para proteger la ciudad de Elendel. No diré mucho de la historia para evitar spoilers de los libros anteriores, pero “el metal perdido” es un viaje lleno de acción (con batallas increíbles), humor y magia. El autor logra cerrar todas los conflictos políticos y sociales planteados previamente, llevándonos un final que es sencillamente inolvidable. 👏👏 Pero si algo me deja este libro es la confirmación de que la imaginación de Sanderson no tiene límites. Gracias a ello la saga está en constante evolución. En este libro se agregan nuevas tramas, personajes y conceptos mágicos-religiosos desconocidos hasta el momento (eso sí, algunos son difíciles de entender 😅). Además, este libro nos enseña un fragmento del gigantesco universo que Sanderson está construyendo con sus otras sagas y relatos. Es fascinante ver como comienzan a relacionarse 👍 aunque también preocupante. Espero que en el futuro la serie “nacidos de la bruma” no pierda su identidad y sobre todo que el autor no nos “obligue” a leer sus otras novelas para entender lo que aquí sucede. Ojo ahí B.S. Finalmente, y como sospechaba, siento un gran vacío. Es duro despedirme de la saga sin saber cuándo regresaré. Pero guardo muy buenos recuerdos 😃 y la esperanza de una “era tres”. Solo queda esperar… |
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