Brazales de Duelo

ESTA RESEÑA CONTIENE SPOILERS DE LOS LIBROS ANTERIORES DE NACIDOS DE LA BRUMA




Waxilium ha perdido la fe tras lo acontecido en Sombras de identidad. Ver morir a quien amas es doloroso, pero sentirte obligado a ello, repetidamente, por el Dios que debería protegerte quizá pase a ser categorizado como extremadamente cruel. Inevitablemente Wax no sabe qué creer ni qué pensar, qué hacer con su vida ni si sus decisiones realmente tienen algún peso en su historia. ¿Podrá salir de este estado depresivo? A lo largo del libro veremos una notable evolución del personaje que nos permitirá conocer quién era y quién es, ya que se nos mostrará su pasado y a personajes clave en este como es su hermana Telsin y, por supuesto, se responderá a la pregunta sobre su crisis de fe.

Sanderson no sólo se recrea en el alomántico, sino que en Brazales de duelo todos los personajes tienen un arco bien desarrollado que nos permite conocerlos más y sorprendernos con ellos, marcándose un antes y un después con lo narrado en libros anteriores. Es difícil seleccionar un personaje porque todos tienen mucho peso en esta novela: Marasi se roba las escenas al dejar de dudar sobre su identidad y sus actos, reafirmándose a sí misma y haciendo gala de una madurez que sólo la experiencia en su trabajo y su crecimiento personal han podido darle. Wayne protagoniza, sin duda, los momentos más cómicos con su ingenioso carácter, pero hay más, no es solo un personaje divertido, es inteligente y fiel y poder descubrir un poco más cómo funciona su cabeza y su relación con Wax será clave para la historia. Para mi sorpresa, lo mismo ocurre con Steris, que deja de ser un personaje secundario poco definido que solo está en esta historia por conveniencia, demostrando que las apariencias engañan y que tenía mucho para ofrecernos más allá de un matrimonio por interés.

Si hay algo a lo que el grupo no se puede resistir es a desentrañar un buen misterio y perseguir a quien atenta contra la ley. Por eso, cuando reciben el encargo de ir a la búsqueda de los brazales de duelo del Lord Legislador y se alerta de que estos pueden guardar relación con Elegante, ninguno se queda atrás, ni siquiera el apático Waxilium. Esta aventura adquiere un tono más épico que las anteriores, estableciéndose ya no paralelismos con la primera era como ocurría en el libro anterior, sino que ahora los vínculos son indudables y dejan claro que el Cosmere es mucho más de lo que imaginamos o creemos conocer, puesto que Sanderson guarda siempre un as bajo la manga y es ahora cuando empieza a mostrárnoslo de un modo que sorprenderá a cualquier lector.

A mi parecer, es el mejor libro de esta segunda era, engancha desde el primer momento y las revelaciones que se nos van haciendo son sorprendentes (y eso que como lectores del autor ya estamos acostumbrados a que nos sorprenda). Además, la caza de la reliquia se narra de un modo curioso, aunque se siguen viendo elementos que sitúan la obra en una ciudad en expansión y con un toque de western, se añade un carácter de caza tesoros, podríamos decir arqueológico, que hace que la aventura sea más divertida, diferente y plagada de acción.