Nuevamente Gema Samaro me ha vuelto a encandilar. Las relaciones que surgen a través de las páginas de contactos, están a la orden del día. Pero ella ha sabido adaptar eso a una relación ya existente entre el Jefe Supremo y la Empleada Petarda. Tras un tiempo comunicándose y llegando a tener una relación que ya quisieran los que se conocen en persona, deciden dar el paso y quedar. Lo que menos esperaba Mía alias Miss Despropósitos, es que Max47 su alma gemela fuese en realidad Pablo Merino, el insoportable de su jefe. Tras leer toda la historia me he dado cuenta de algo, es más fácil abrirse a través de una pantalla que en persona. En este y por suerte, tienen la oportunidad de conocerse sin saber que ya se conocían y comprobar que esa persona al otro lado de la pantalla, en un cara a cara sigue siendo lo que siempre habían esperado. |