El gorrión de java

Querido Soseki,

Te escribo para decirte que éste es, sin duda alguna, mi libro de relatos breves favorito.

Leerte me ha servido para darme cuenta de cuan impregnadas se hallan estas páginas del budismo zen que te imbuye. No me malinterpretes, no se trata de una crítica, sino de un halago. No en vano, de eso va este libro, si no me falla la comprensión.

En estos relatos te limitas a presentar al lector los hechos con descripciones sugerentes, pero siempre evitando los juicios y opiniones a los que estamos acostumbrados la mayoría de los seres racionales. Ese es tu regalo para con el lector, ofrecernos la posibilidad de hacer nuestra aportación a cada historia, enjuiciando los actos de cada uno de los personajes y aportando sentimientos y emociones impregnadas de nuestras propias vivencias y filosofías de vida. Pero claro, ésta es tan solo mi humilde opinión.

Siempre me ha parecido admirable la capacidad de algunos escritores de plasmar escenas sencillas y cotidianas y conseguir que el lector sucumba y quede atrapado en la historia, y tú, querido Soseki, dominas esta técnica a la perfección.

Sólo me falta decirte que ésta no será mi última lectura compuesta bajo tu pluma y que me comprometo a recomendar este libro de relatos con ahínco.

Sin más, hasta nuestra próxima lectura compartida. Un placer leer a tu lado.

Firmado: tu lectora satori.