El escarabajo de Horus

Escogí esta novela porque al leer el pequeño resumen editorial de la contraportada descubrí dos de mis innumerables pasiones: París y arqueología de Egipto. Ahí acabó mi pasión por este libro. Si al menos al final del mismo no hubiera mencionado el nombre del joven faraón protagonista de esta insulsa aventura... El de verdad, Ramses II, el gran faraón poseedor de muchos nombres (entre ellos defensor de Egipto, o rey constructor) a la edad que la autora pretende hacerle coprotagonista ya estaba casado con Nefertari, y era comandante en jefe del ejercito.
Vale que estamos ante una novela de aventuras destinada al público juvenil, pero esto no está reñido con la coherencia y la fidelidad a la historia que precisan nuestros jóvenes. Es más, yo diría que sería totalmente exigible.
Y dicho esto, apenas una pincelada, sobre el contexto histórico, decir que para ser una novela para adolescentes, y tener la protagonista diecisiete años, su modo de hablar, de comportarse, resulta infantil y simplón, del mismo modo que las aventuras que corre parecen sacadas de una película de Indiana Jones, o La momia. Nada realmente original, todo es bastante previsible: la enorme bola rodante que les persigue, la tierra que se abre a sus pies y los engulle, las paredes que se estrechan, los pasadizos bajo el agua...
Conste que la idea es buena, pero reiterativa. Carla y Miguel son dos hermanos cuyo padre, conservador de museos, trabaja en esos momentos en el Museo del Louvre. Casualmente se encuentran con un amuleto egipcio, un escarabajo, que les transportará en el tiempo, dándoles (en realidad es ella porque el pequeño "desaparece" prácticamente) la oportunidad de vivir una serie de aventuras para tratar de parar la venganza que está a punto de consumar el dios Seth. Los personajes son poco creíbles, y algunos, ya digo, desaparecen de la historia (Tolomeo, Miguel) mientras que otros aparecen y desaparecen sin mucha coherencia (Relámpago el camello, Said, Kaifás) Una incipiente historia de amor, amistad, que luego no se consuma; una rivalidad adolescente que tampoco lo hace; una crítica social a la esclavitud que podría desarrollarse mucho más... Los adolescentes a los que va destinado este libro ya no son unos niños, la historia debería, desde mi punto de vista, ser más "realista".
En definitiva, muchos fallos en esta primera novela juvenil que leo de esta autora (será que es la primera que escribió) por eso que mi valoración es tan baja. Una pena, París y la arqueología de Egipto merecen mucho más.