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Esta segunda entrega comienza pocos días después del final de la primera parte. Iris ha regresado a Juramento, tras verse obligada a dejar a Roman atrás. No sabe si está vivo. Si Dacre le ha lavado el cerebro y sumado a sus filas. No sabe nada. Hasta que aparece un artículo en La gaceta, escrito por él. Roman es ahora un siervo de Dacre. El dios curó sus heridas, pero también borró su mente. Ahora Roman debe servirle, mientras retazo a retazo, trata de recuperar sus recuerdos. Roman e Iris vuelven a estar separados. Solos con sus maquinas de escribir. Mientras la guerra avanza paso a paso y amenaza con destruir todo lo que aman. ¿Será Roman capaz de recordar a Iris? ¿Podrán parar el avance de Dacre y salvar a los suyos? ¡Qué historia tan bonita! He amado esta bilogía de principio a fin y voy a estar recomendándola, hasta que todos y cada uno de vosotros, la hayáis leído. Esta segunda entrega tiene un ritmo más pausado, sobre todo en la primera parte. Pero también nos recuerda un poco a esos primeros momentos, de Iris y Roman conociéndose. La segunda mitad del libro tiene mucha más acción, momentos de tensión y os adelanto, que también os robará alguna lagrimita. La ambientación sigue siendo excepcional, una historia de realismo mágico ambientado en la primera guerra mundial, con toques de magia y mitología. Muy logrado. ¿Y que os puedo decir de Roman e Iris? Que son dos protagonistas que se van a ganar un hueco en vuestros corazones irremediablemente. Es sin duda una de esas historias, que se quedan contigo, incluso tras cerrar la última página del libro. |
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