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Existe una creencia común, de la que yo también fui creyente durante algún tiempo, de que el género del Fantasy en Latinoamérica es yermo o cuando menos, una copia de los referentes más importantes del género en lengua inglesa. A lo mejor, esta creencia tan común sea fruto del mercado editorial, que, como tantas cosas en estas tierras latinas, se embelesa por las cosas que vienen del norte o del otro lado del mar como las mejores, reveladoras y de lo que todo el mundo tiene que hablar. Esta práctica tiene varias consecuencias para el género: La primera es que opaca las propuestas que llegan a buen término. La segunda es que provoca una sensación de que todo dentro del género se tiene que hacer según los cánones de la lengua inglesa, de que no existen otras formas de hacerlo. Y la tercera es que se ignore toda la tradición del continente como fuente primaria para las historias del género que se puedan construir. Pero de eso llegará el momento de hablar con más detalle y en otro espacio. Traigo a colación estos pensamientos pues han sido parte de los pensamientos más recurrentes de Paula Rivera sobre el género y mi motivación principal para abrirle un espacio entre mis lecturas a esta corta antología de cuentos de su pluma. Como suelo hacer con antologías de cuentos, acá va una lista de los cuentos y una vaga idea sobre el argumento de cada uno de ellos: • Las lágrimas de Lianna: Un cuento sobre el destino y la necesidad de anteponerse a él • Canción de grillo: La historia de una niña que en la transformación encuentra la forma de huir al maltrato • Memoria: Un homenaje a los RPG y el papel que juega el camino —y no el destino— tanto en la aventura como en la vida En estos tres cuentos, Paula propone historias que se desarrollan en espacios reconocibles para los lectores, pero que a su vez se desprenden de los anglicismos que tanto pululan hoy en el género. Los cuentos están ingeniosamente narrados y cada uno muestra lo versátil que es Paula como autora pues todos tienen detalles que los hacen brillar por sí mismos: Hay espacio para las canciones y para las elipsis, pero también para los pensamientos más profundos de los personajes. Estos elementos logran mantener la atención en la lectura de todos los cuentos y los nutren de forma bella y sutil haciendo que cada uno sea una experiencia memorable de lectura. De los tres me gustaron mucho los personajes femeninos. Todos son fuertes, con un carácter bien definido y lejos del arquetipo edulcorado que dio Disney a los personajes femeninos. Este es el motivo por el cual de los tres mi favorito sea Las lágrimas de Lianna. Un cuento en el cual la protagonista pese a las circunstancias y su rol dentro de la sociedad, toma las riendas de su destino. Los cuentos tienen finales con giros muy interesantes y que darán pie para detenerse un poco y pensar más sobre la verdadera trama de ellos. No son para nada predecibles ni llegan a sitios comunes. Así que déjense sorprender por ellos. Lo mejor del libro es que está disponible gratis y de forma legal en la página de la autora, así que vayan a la página de la autora y regálese esta joyita. Ojalá esta antología fuera más extensa y tuviera más cuentos de la pluma de Paula porque todos provocan a seguir leyendo y descubriendo los árboles que se siembran en este lado del mundo en el bosque de la fantasía. |
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