La última descendiente

Ana Dakkar no es una adolescente del todo normal. Perdió a sus padres en un trágico accidente, es extremadamente inteligente y acude a una academia en la que preparar a los mejores navegantes e investigadores oceánicos del mundo. Sin embargo, un ataque imprevisto hará que Ana y sus amigos deban dejar su hogar e ir en busca de lo inesperado, la leyenda del capitán Nemo y su famoso submarino.

Riordan deja de lado su mundo de semidioses para traernos esta historia que bebe de "20.000 leguas de viaje submarino" pero con toques tecnológicos contemporáneos e incluso futuristas. La forma de hilar su trama con este clásico se da de modo natural, con pequeñas pinceladas que profundizan cada vez más en lo que pudo ser de Nemo y el Nautilus.

Y es que el Nautilus tiene un gran peso en la historia, rastreando lo que se sabe de él para que Ana descubra también su pasado y su relación con esta historia mítica. Es una protagonista capaz, que trata de hacer lo mejor posible en todo momento pero con partes de vulnerabilidad y sin dejar de lado sus miedos e inseguridades, lo que la hace más creíble. Como negativo estaría toda la información sobre máquinas y aparatos que se da en el libro, que al principio interesa pero acabó por aburrirme e incluso perdì el hilo en algún momento.

Una aventura llena de misterio, acción y con chavalería brillante que ayuda a despertar el interés por la obra de Verne sin perderse a sí misma.

Colibrí.