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Cuarto libro de la saga y uno que por fin inicia en otro ambiente que no es el del duelo. Aquí conoceremos a Iris Smythe-Smith, violonchelo en la terrible velada musical anual, su carácter llama la atención de Richard Kenworthy, quien por extraño que parezca decidió acompañar a su amigo Wiston Belvestoke a la velada, y pone sus ojos en Iris, comenzando un cortejo muy apresurado y logrando ganarse la mano y el corazón de Iris, pero es que Richard esconde un gran secreto y es que necesita casarse rápidamente es por eso que cuando decide que Iris debe ser la mujer con la que deba pasar su vida la pone en una posición comprometedora, lo que ocasionara que sea imposible para la muchacha rechazarlo. La verdad es que de los cuatro libros este es el que más me gusto, tienen muchas referencias a Jane Austen y otras autoras y eso me encanta, también los personajes, Iris es un personaje que todos sienten que es frágil y débil pero demuestra una gran fortaleza, Richard por otro lado es un hombre que le toco hacerse cargo de la vida de sus hermanas y esto lo ha orillado a hacer acciones imperdonables, la química entre estos dos se me hace muy buena y me encanta el misterio y la revelación del porque la necesidad de una boda tan rápida. |
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