Érase una vez un rebelde

Este libro es parte de una serie de libros independientes en los que conoceremos a los Calaveras redimidos y sabremos cómo transcurrió su vida después de haber escapado a una muerte inminente.

En este caso conoceremos la historia de Gordon y Callista, quienes desde chicos eran amigos y en su adolescencia tuvieron que separarse debido a acuerdos matrimoniales. Sabremos todo lo que les pasa después de su separación, la manera en la que se reencuentran y como se rinden al amor, situación que he disfrutado muchísimo.

En el primer libro de los Calaveras redimidos sentí que la historia era demasiado irreal, que todo pasaba tan de prisa (inclusive el romance) por lo que la historia no fue de mi agrado. Pero aquí todo tiene coherencia, se nos presentará una relación en la que los sentimientos han perdurado a pesar del tiempo y la distancia y en la que solo se necesitaba de un impulso para que esa amistad floreciera y se convirtiera en un bonito romance. de esos romances que son añorados por el lector y que inclusive dan ganas de vivir.

Pero lo que más me ha gustado de ésta novela es la actitud que tiene Callista ante las experiencias que vive en su estadía en Jamaica, la consideración y el respeto que tiene hacia los seres humanos que en esa época eran tratados como esclavos, la manera en las que les devuelve su dignidad y se gana el cariño y el respeto de muchos. Sin duda ella ha sido mi personaje favorito.

Y como si todos estos elementos no fueran suficientes para agradar al lector, también nos encontraremos con los momentos de suspenso y acción que vivieron en la batalla de Baltimore y con los cuales me mantuve en vilo pero también me llevaron a querer vitorear ante la inteligencia y valentía de las mujeres.

En resumen, una historia llena de suspenso, acción y romance como solo se pudo haber vivido a principios del siglo XIX.

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