Africanus

¡Acompañadme! ¡Por Cástor y por Pólux! ¡Vamos a Roma! ¡A Roma!

Segunda Guerra Púnica. Amílcar Barca tras la derrota infligida por los romanos a Cartago, inicia la conquista de nuevos territorios buscando fuentes de riqueza que llenen las arcas cartaginesas. Esos horizontes empiezan en Hispania. Los planes de Amílcar van más allá de simples recursos de financiación, él conquistará Roma.

Durante más de ochocientas páginas he acompañado a los soldados cartagineses y a las legiones romanas. He disfrutado con Aníbal y los Escipiones; con las estrategias diseñadas por hombres valientes, inteligentes y honorables, que saben reconocer y respetar a un rival brillante cuando lo tienen enfrente; y he batallado con esos hombres que son capaces de dar su vida por defender su patria con orgullo y honor. Nunca creí que pudiera absorberme tanto la narración de una batalla, y no ha pasado con una solamente, han sido varios los combates a los que me he asomado y peleado con púnicos y romanos hasta el último aliento.

Personajes interesantes todos y cada uno de ellos, protagonistas y secundarios, que nos acercan a la política, con senadores sibilinos que son capaces de cualquier cosa para alzarse con el poder; soldados valientes y abnegados que obedecen y acatan las órdenes sin rechistar, en busca de una fama y fortuna que no siempre llega; ciudadanos, hartos de guerras y luchas, que los tienen sumidos en la miseria y el miedo; y genios de las palabras que son capaces de crear obras ingeniosas que durante el breve tiempo en que dura una representación teatral, trasladan a su público lejos de la guerra, la miseria, el hambre y la desolación.

Ha sido una lectura entretenida con la que he disfrutado. Solo os puedo decir una última cosa, con Posteguillo....¡Hasta el infierno! ¡Hasta el infierno! ¡Hasta el infierno!