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Keira es una policía con un instinto privilegiado y una mente matemática que no pierde detalle. Por eso cuando el aristócrata Ástor de Lerma comienza a recibir amenazas unido a la misteriosa desaparición de una alumna del campus del que es dueño de Lerma todo apuntará en dirección de la inspectora, la única capaz de encontrar la solución. Aunque el mundo de Ástor esconde demasiados secretos y muchos posibles culpables. ¿Podrá Keira sobrevivir a todos ellos sin perderse en el camino? La historia te atrapa desde el minuto uno, todos los misterios que se abren ante tus ojos te mantienen pegado a las páginas necesitando descubrir el misterio. Los personajes son adictivos, y van evolucionando tanto durante la historia que es un gusto acompañarlos en el camino. Los secundarios no se quedan atrás, todos se convierten en sospechosos y te encuentras analizando cada detalle, cada frase en busca de la verdad. El final de la novela es apoteósico, te deja con la boca abierta y mil ganas de empezar con la segunda parte. Porque un nuevo misterio se abre paso ante tus ojos, el juego ha vuelto a comenzar. ¿Te lo vas a perder? |
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