Bigudì sonrió otra vez sin darse cuenta. Su risita era tímida pero sincera. De repente, tuvo muchas ganas de reír y de llorar al mismo tiempo. Dio un fuerte suspiro y se dejò arrolla por una gran ola de gratitud.
|
Bigudì sonrió otra vez sin darse cuenta. Su risita era tímida pero sincera. De repente, tuvo muchas ganas de reír y de llorar al mismo tiempo. Dio un fuerte suspiro y se dejò arrolla por una gran ola de gratitud.
|
¿Cuál de los siguientes libros fue escrito por Gustave Flaubert?