Es un cuento narrado en forma de cómic preciosísimo, y no solo por lo bonitas que son las viñetas, si no por el mensaje que transmite en tan poquitas páginas que se leen en un suspiro: luchar y ser valiente para vencer a tus miedos (lo que le sucede al personaje Ajo) y el no prejuzgar a los demás por lo que se cree que son (como le sucede al pobre vampiro que es bueno y no hace daño a nadie). Me encanta la protagonista, que es el Ajo super miedosa, y su amigo la zanahoria cariñoso y comprensivo, además su relación amistosa es adorable y muy tierna. Me pareció un punto curioso que estén intercambiados los géneros porque supuestamente un ajo es masculino y la zanahoria es femenina. Sin duda es un cuento maravilloso para leer a los peques pero también uno con el que los adultos podemos disfrutar su lectura. |