La gota de sangre, aunque es un relato sencillo y bastante previsible, creo que merece la pena leerlo por varias razones. La primera es que Emilia Pardo Bazán escribe de una manera única. La segunda, porque es el primer relato policial que se publicó en España y es una buena manera de ver cómo se inició el género policiaco en nuestro país y ver cuál fue el origen del que partió. |