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El libro nos habla de Nita, que viaja al mundo humano una semana al mes para trabajar de activista. Allí conocerá a Eric, que acaba de tomar el mando de la petrolera de su familia. Lo que comienza como una simple reunión, pronto se volverá mucho más enrevesado y peligroso. Como retelling me ha gustado mucho. Las similitudes están muy bien escogidas, sin dejar de ser una historia propia y totalmente nueva. Nita me ha gustado por el contraste entre su inocencia y su ingenuidad, con esa parte luchadora y con carácter dispuesta a todo por proteger su hogar. Eric es más oscuro y más complejo que Nita, con muchos secretos y un pasado complicado. Los secundarios se quedan un poco de lado, sin llegar en profundizar en nadie, aunque son muy abundantes. Sí que me gustaría destacar a Sebas, que menudo crush! La historia toca muchos temas. El romance empieza un poco enemies, ya que los dos son muy opuestos, pero la atracción es innegable. Y al pasar tiempo juntos irán cayendo prejuicios e ideas preconcebidas. Es un poco repentino. También habla mucho de crecimiento personal, de tomar decisiones y afrontar miedos. Y la crítica y la lucha sin descanso por los océanos. Este tema es el que más me ha gustado y el que está mejor tratado. La narración es muy sencilla y el libro se lee muy rápido. Me ha faltado algo más a nivel ambientación, ya que el reino marino se ve muy por encima. También me ha pasado con el final, que pasa demasiado rápido. Me hubiese gustado más desarrollo a nivel general y que todo se asentase mejor. Una historia sencilla en su forma, que no en su contenido, muy entretenida, muy feel good y perfecta cuando apetece algo más ligero. |
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