Qué sientes cuando no sientes nada

Que sientes cuando no sientes nada…

Yo si que he sentido muchas cosas con este libro: rabia, impotencia y mucha desesperación …
Rabia por no poder ayudarla, por no poder gritarle a esos padres ausentes que sólo ven el problema cuando ya los ha sobrepasado, porque lo malo de este tipo de enfermedades es que destrozan el hogar en el que entran y ni siquiera lo has visto venir.
En la sociedad actual, donde hay unos estándares de belleza tan marcados ( los cuales no cumplo…) los trastornos alimenticios están a la orden del día, demasiado cerca y demasiado frustrantes, dolorosamente reales.
Hace casi 2 años decidí cambiar mi aspecto físico, por salud y por vanidad, porque negarlo, a día de hoy he perdido 40 kilos( aun me sobran más) y conozco perfectamente lo que significa no encajar, buscar el refugio de la incomprensión porque realmente sientes miedo de no poder cambiar lo que quieres, miedo al fracaso, y el “no me entendéis” es un salvavidas, engañoso, pero a mano siempre.
No me malinterpretéis, yo no tengo trastornos alimenticios, a parte de mi idilio con el chocolate, pero entiendo a la protagonista que busca siempre la excusa para justificar, en su caso su trastorno, en el mío, la falta de fuerza de voluntad.
Este libro me ha llegado en un momento de cambio personal, ademas tengo un allegado que si está viviendo este problema seriamente con una hija, y me ha dado mucha angustia reconocer todos los síntomas con los de la protagonista…

Me quedo con la enseñanza, me quedo con las recomendaciones que haré de este libro basado en historias reales, me quedo con que, a veces, hay salida.