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Narrativa exquisita con buen ritmo inicial, un interesante elenco de personajes y razas y un viaje en busca de respuestas en el que para entender el presente, debemos conocer el pasado, del cual iremos sabiendo en pequeñas dosis a lo largo del libro. La trama se va tejiendo a través de diferentes caminos hasta unirse en un camino común con intereses variados. Apenas se resuelve un problema, surge otro, y así se nos va desvelando el misterio a la vez que se nos plantean nuevas dudas. Los personajes me han gustado mucho. Mirah es una princesa con mucho carácter que lo demuestra solo cuando es necesario. Daval, un silfo arrogante y callado, que poco a poco irá abriéndose. Y Fury, receloso y desconfiado de inicio a fin pero siempre dispuesto a apoyar a Mirah en lo que necesite. Y, alrededor de ellos, muchos más que a buen seguro darán que hablar en próximas entregas. Muy interesante también la representación de clases y estatus sociales entre las diferentes razas. En cuanto a romance, de momento solo pinceladas, miradas, gestos, pero aún habrá que ver hacia dónde se inclina Cupido, si es que lo hace. Como menos positivo diré que en algunos momentos me sentí desubicado en cuanto a localización. También, en mi opinión, hay exceso de casualidad, intuición o deducciones sin base, y sentí que el final corría más de lo deseado. En definitiva, una historia que te lleva en volandas, gustosa de leer y que te deja en un punto con mucho por contar aún. Cantidad de intrigas y teorías de las cuales solo tenemos alguna respuesta y el resto está por descubrir. Por suerte, no tendremos que esperar mucho para tener la continuación. ¿Has recorrido Elania? ¿Te llama? Pues cuidado con las voces... |
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