Munajil

Sahira, más bien conocida como Munajil, es la asesina más peligrosa de Fawdaa. Acompañada siempre de su guadaña, su trabajo es matar gente a cambio de dinero. Pero un día Sahira decide no aceptar un encargo, y por ello acaba con un brazo mecánico y sin su ser más querido. Así que agarra su guadaña y jura vengarse. Quien se haya atrevido a arrebatarle lo más preciado de su vida, lo pagará muy caro.

Me ha gustado mucho la protagonista. Sahira, o más bien, Munajil, es una asesina, una anti heroína atormentada con la que recorreremos un camino de venganza cuando su mujer es asesinada, y sin nadie a quien recurrir, tendrá que recorrer este camino sola. Munajil está destrozada, pero también es implacable y no se detendrá ante nada, llevándose por delante a todo el que tuvo algo que ver con su muerte. Y es que a la familia no se la toca.

Sahira es una qaalit, y uno de los detalles más interesantes de ellos son las plumas que llevan en el pelo y que representan un momento importante en su vida, bueno o malo, un recuerdo que quieren tener siempre presente. Esto me ha parecido muy bonito y original.

«Nueve plumas, hojas brillantes que destacan entre la maraña de ramas desiguales y negras de mi alborotada melena. Como la violeta, la más larga, que me pusieron mis padres al nacer. La marrón, que yo misma busqué cuando Enzi y yo nos hicimos amigos. O la verde, para recordar siempre aquellos ojos que brillaban en medio de la oscuridad de Turba cuando la conocí ».

La ambientación está muy lograda. Fawdaa es un planeta dividido en varios niveles. En los pisos más bajos están los más pobres que viven casi como esclavos entre el olor a metal y tierra bañada en sangre, y a medida que van subiendo los niveles, tienen mejores condiciones. Hasta que llegas arriba, que son los privilegiados y los únicos que pueden contemplar la luz de las estrellas.

He disfrutado mucho esta novelette. Tiene algo menos de 200 páginas pero es muy completa e intensa y atrapa desde el principio. Una historia sobre pérdida, amor, lealtad y traición.

Es la primera vez que leo a Cristina Ogando y me ha encantado. Consigue que, a pesar de que Sahira sea una asesina, empaticemos con ella y su dolor y queramos que consiga encontrar a la persona que asesinó a su mujer. Además, el libro está muy bien narrado y tiene muchas escenas de acción rápidas y ágiles, así que se lee en nada.

*4,25/5*