“La primera mano que sostuvo la mia” nos lleva por dos líneas temporales: la primera de ellas sucede en el Londres de la década de los cincuenta y sesenta, en plena recuperación posterior a la segunda guerra mundial, protagonizada por Lexie Sinclair, que deja su Devon natal para establecerse en la capital con Innes Kent, mayor que ella, casado, director de una revista de arte y entregado a una vida libérrima que choca con todo lo que la joven Lexie había conocido. La segunda sucede en las mismas calles medio siglo más tarde, con una ciudad transformada y con Elina Vilkuna, una artista finlandesa y madre primeriza que se despierta por las noches pensando que no ha dado todavía a luz y recuerda vagamente que tuvo problemas durante el parto, pero no sabe bien por qué. Dos historias, dos mujeres que a priori no parecen tener ninguna conexión pero que poco a poco se nos va desvelando una intrahistoria que las conecta. Una novela que habla de la parte más difícil de la maternidad, ya sea en soledad o en pareja, y los cambios y su forma de afrontarla en dos épocas bien diferenciadas. Un retrato de ésta conmovedor pero bastante realista. Una novela para disfrutar de su historia, del qué y el cómo de la misma. Y con el estilo ágil y sosegado de O'Farrel que complementa con unos personajes magníficamente desarrollados cuya descripción de sus emociones hace que fácilmente empatices con ellos. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |