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Sirvan mis palabras como vindicación por todas aquellas personas que han sido perseguidas, vilipendiadas, señaladas y represaliadas por defender y vivir acorde a sus creencias a lo largo de la historia. En especial hoy en reivindicación por los derechos de memoria histórica de aquellas mujeres que han permanecido en el anonimato en un intento de silenciarlas. Vaya por todas aquellas madres, compañeras, hijas, amigas que lucharon cada una dentro de sus posibilidades y de sus medios para que actualmente tú y yo podamos estar en el lugar que nos encontramos. De todo esto trata "Nietas de la memoria". Es este un libro de memorias, de historias con nombre y apellido, de las voces de unas valientes y guerreras mujeres que no se amedrentaron en plena guerra civil española para luchar por sus familias. Hoy su recuerdo nos llega gracias a la pluma de sus nietas, bendita tradición oral gracias a la cual permanecerán en nuestro recuerdo y llegarán a futuras generaciones. Y empleo la ya tan manida frase atribuida a Napoleón de que "aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla" hoy, justo hoy, más que nunca se hace imprescindible. Diez mujeres que se levantaron una y mil veces, diez relatos escritos por diez nietas, diez estilos diferentes y los diez llenos de sentimiento. No puede uno pasar por un libro así sin que algo se le remueva por dentro. Narrados de tal forma que puedes asistir a cada escena cual mudo espectador, sentirás que cada una de estas mujeres ocupará un pedacito de ti y sirva toda esta narración como un granito más de arena para que la igualdad y equidad sociales sean definitivamente valores fundamentales y no controvertibles. No hay que dejar pasar por alto el excelente prólogo de la mano de Carmen Sarmiento, periodista feminista española y primera mujer corresponsal de guerra. Un único apunte en cuanto a esta edición de impecable estética: hay bastantes errores tipográficos, que, aunque no entorpecen la lectura, si sería recomendable subsanarlos. |
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