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Me ha gustado bastante, engancha de principio a fin. Fácil de leer gracias no solo al estilo de la autora, que carece de artificios, sino también porque la historia se estructura en episodios cortos. Adolece de tener muchos personajes en los que se profundiza en sus vidas privadas, pero lo que a priori da la sensación de un embrollo, Nele acaba hilando cada una de las historias de forma muy sutil, manteniendo la expectación a raya. Personalmente he entrado en el juego de la autora porque he sospechado de todo el mundo, por lo que la resolución del caso me ha sorprendido. Aunque el final responde muchas de mis preguntas y reubica a ciertos personajes, se me han quedado algunos frentes abiertos y varios personajes como colgados: necesito saber qué ha pasado con ellos, porque además son personajes a los que he cogido mucho cariño y han estado muy presentes durante la trama. Otro punto en contra es la traducción. En algunos pasajes me ha resultado algo precaria con el uso de expresiones nada habituales y con otras demasiado coloquiales. Un aspecto que me ha gustado muchísimo de esta novela ha sido que somos testigos de cómo un crimen afecta no sólo a la familia de las víctimas sino también a la del culpable. Por otro lado, le doy mi enhorabuena a la autora por haber retratado de forma tan minuciosa y realista el ambiente opresivo y engañoso propio de los pueblos aparentemente idílicos donde todos se conocen y parece no pasar nada, pero en los que realmente existen odios, sed de venganza, ambiciones, mentiras, secretos, que todos conocen, pero que todos callan. Agradezco a Nele el haber creado unos agentes de policía muy de carne y hueso: no son unos rompecorazones, no tienen un affaire entre ellos, no tienen ninguna adicción ni traumas y hablan como tú y como yo. Pia y Bodenstein son personas normal y corrientes. Una lectura que no te será indiferente, ya desde su título impacta: Blancanieves debe morir. Aunque os adelanto que todos los títulos de la serie de estos agentes de policía impactan. Yo ya voy a por ellos, no lo dudo. |
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