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«… me da miedo tener miedo…, que el miedo me atrape y no pueda salir de él» No hay Harry Hole, para aquellos que como yo esperasen su regreso, no será con esta historia, pero hay algo más, un giro que no me esperaba, que me desconcertó y me atrapó, buscando las respuestas. La novela se divide en tres partes. La primera parte, para mí que racionalizo cada lectura me descolocó sobremanera. Los sucesos que rodean a Richard parecen producto de alguna enfermedad mental, la pregunta es, ¿qué hay detrás de esos episodios tan traumáticos? Mezcla sucesos paranormales y magia negra. Richard quiere descubrir la verdad, nadie le cree, yo sí. Me imaginé decenas de escenas que justificasen lo que ha visto, le drogaron o una interpretación de su cerebro sujeta a un trauma, una esquizofrenia. Me sobrecoge que quieran ingresarle y tirar la llave. En la segunda parte tiene cierto sentido lo que se explica y da coherencia racional a esta primera parte, pero por alguna razón, la historia se me aleja, porque Jo Nesbo siempre busca el por qué y no él qué o el cómo. Con la tercera parte, todo queda cerrado con más coherencia, aquí sí está el escritor que conozco. Ha jugado conmigo; ofrece una historia, contada desde tres perspectivas, desde dentro de la locura, desde el proceso curativo y desde la coherencia racional, ¿con cuál de las tres te quedas como lector? Yo no sabría qué decir. Un relato que navega por el sufrimiento humano. «Si quieres matarlos de verdad, tienes que hacerlo dos veces. Si no, regresan». Yo necesito racionalizar y los pies bien sujetos a tierra. Una historia oscura y terrorífica ideal para Halloween. Muy diferente a lo que nos tiene acostumbrados. |
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