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La historia comienza con una confesión espeluznante en Roma, donde un hombre misterioso desvela sus planes de cometer un asesinato, mientras una joven arqueóloga nieta de un poderoso hombre de oscuro pasado, anuncia en un congreso el descubrimiento de unas tablillas, obra de un escriba desconocido, en las que se relata algunos acontecimientos bíblicos según el profeta Abraham, y que supondrían la prueba indiscutible de la existencia del patriarca. Justo antes del inicio de la última guerra del Golfo, la arqueóloga pondrá en marcha una peligrosa excavación, que pondrá en riesgo su vida y la de su abuelo, sobre el que se cierne una venganza implacable. Cómo ya os he comentado, al principio no me llamaba demasiado, pero conforme empecé a leer, me fui sumergiendo en una historia trepidante, en un viaje histórico incomparable a los primeros tiempos hasta llegar a Irak en tiempos de Sadam, pasando por los principales escenarios de la Segunda Guerra Mundial, todo ello acompañado por una intriga que se va cociendo a fuego lento y que te mantiene expectante durante toda la historia. |
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