Kota ven

Este manga es divertidísimo y entretenido, tanto que se lee en un suspiro. En él nos encontramos con Kota, un perro con alma de persona, que de hecho nos hace saber que es superior a mucha gente, y sobre todo, a los demás perros.

Kota es alegre pero cabezón, y no da su pata a torcer por cualquier contratiempo. A lo largo de los capítulos que componen los dos libros de este volumen vemos el momento en el que Kota se une a la familia de este dibujante de manga. A partir de ahí, tendrán que aprender a convivir con él y sus ocurrencias.

La familia de Murakami sigue la siguiente jerarquía, según Kota: la madre es el ser más superior de la casa, la diosa para el perro; después va el propio Takashi, seguido de su hija mayor; Kota es el siguiente en la línea jerárquica y por último está el hijo. Éste es visto como el hermano pequeño de Kota, al cual puede masticar como un chicle y jugar con él a lo bestia. Todo aquel que quiera algo de Kota, tendrá que hablar con la madre para que ésta se lo pida, ya que es el ser de luz del perrito.

Quien tenga perro se sentirá muy identificado con este libro, ya que está lleno de situaciones que todos hemos vivido alguna vez. Además, está contado de una manera cómica de tal forma que te apetece siempre continuar un poco más.

La edición cuenta con fotos del propio Kota, lo cual me parece un gesto tierno que hace que solo podamos desear lo mejor a este perro tan divertido.