Papá se ha ido de caza

En primer lugar dejadme dar las gracias a Babelio, Masa Crítica y a Impedimenta por este magnífico ejemplar. Destacar la preciosa edición que Impedimenta ha hecho de este libro. Desde la magnífica portada con sobrecubierta, pasando por una calidad de papel impecable y terminando por los detalles que acompañan el libro.
Vamos con la obra:
Decir que este libro incomoda es quedarse corta. Que un libro escrito en los años 50 del siglo XX aborde el tema de estas mujeres de clase media alta de este modo, sería en su día una apuesta muy arriesgada. Hoy estamos acostumbradas a leer y ver libros y series sobre este tema (Mujeres desesperadas y similares) pero en esos años hablar de que una mujer era infeliz a pesar de que su vida es un escaparate de vida perfecta, prácticamente debió ser un escándalo.
En este libro veremos el desconcierto que sienten en esas vidas de opereta que les toca representar... Deben ser amas de casa excepcionales, esposas amantes y sumisas, madres amantísimas... Para todo ello las han educado y les han dicho que esa será su felicidad ¿y qué ocurre cuando descubres que no sólo no eres feliz, que incluso vives amargada?
Como veis, no es un libro amable para leer. La autora escribe de una manera tan sublime que su prosa nos parece ligera pero nada más lejos de la realidad. Hace que sus frases, sus personajes, sus escenas nos resulten tan conocidos que llegan a doler.
¿Recomendaría este libro? Sí, sin duda alguna. Lo recomiendo por la magnífica calidad literaria, lo recomiendo por ser una obra muy arriesgada dentro del contexto de su época de escritura... Pero no os voy a engañar, es un libro que aunque me ha gustado mucho; de tan coherente, deja amargura hasta el final de sus páginas, mucha. Es un libro donde esas mujeres tratan de gritar tras sus collares de perlas y sus casas perfectas