Me caso en invierno

¡Hola, bonic@s! Comenzamos el último lunes de octubre y ya cuesta abajo hacia navidad. ¿Tenéis ganas?

Hoy me paso por aquí con “Me caso en invierno” de @sarahmorganwrites y publicado por @harpercollinsiberica en su sello #Harperf a los que agradezco el envío del ejemplar.

En esta lectura vamos a tener no una, sino tres historias que ocurren a la vez. Conoceremos a Maggie, la matriarca de los White, a Katie, la hija mayor y a Rosie, la pequeña. Rosie da la noticia de que se casa en Aspen, a unos cuantos kilómetros de Oxford, donde viven los White, pero nadie conoce al novio y creen que todo es muy precipitado. Los primeros que acudirán allí serán Maggie y Nick, que ocultan un secreto y tendrán que fingir ante todos para que todo transcurra con normalidad. Más tarde llegará Katie, quien no está pasando por su mejor momento, pero siendo quien es, está acostumbrada a guardárselo todo para ella y cree que Rosie va a cometer el mayor error de su vida. Con este panorama y en un enclave invernal paradisiaco, veremos como Rosie afronta los días previos a la boda.

Es la primera vez que leo a la autora y ya quiero leer algo más de ella. Su pluma hace que te veas inmersa en esos paisajes nevados de Aspen. La historia me ha encantado y como de normal me fijo en las portadas y no en las sinopsis, me he llevado una grata sorpresa.

Nos vamos a encontrar con una comedia, con su parte de drama, familiar. Maggie es brutal, una madre preocupada por sus hijas, que durante toda la vida las ha antepuesto a todo y ahora que no están en casa se siente insegura, pero la tía las arma que da miedo. Rosie es vitalidad, espontaneidad, alegría, pero si hay alguien que me ha llegado especialmente ha sido Katie. Una médico que todo se lo carga a sus espaldas sin compartir lo que siente por miedo a preocupar a nadie, pero que cuando se atreve a abrirse es muy vulnerable y necesita de todos. Los personajes masculinos son “too much”, sobre todo Jordan, que saliendo poco es de los que más llegan.

He disfrutado mucho de estos personajes y ya estoy deseando meterme en otra historia de la autora.

Ideal para leerlo una tarde de invierno. ¡Pilla un chocolate caliente, una manta y disfruta!