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Creo que los autores en las segundas partes siempre pecan de querer dar lo mismo pero como más intensidad, repetir el éxito pero dando aún más. Si la primera era ñoña en el buen sentido, en esta se nota demasiado la época cuando se escribió y a mí a ratos se me ha hecho pastelosa. No puedo decir que no me haya gustado pero no tiene la calidad y el encanto de la primera novela, además esperaba una evolución y más profundidad en la historia, y es más como una sucesión de anécdotas ordenadas cronológicamente. Anécdotas más o menos divertidas pero no sé, esperaba más, hay muchísimos personajes secundarios y muchas anécdotas pero esperaba más sobre Ana, Gilbert, etc. No sé cómo explicarlo pero me parece más un libro sobre Avonlea que sobre Ana. El primer libro me lo leí en un día, en este he tardado varios porque me leía un par de capítulos, y sí, algunos graciosos, otros menos... Pero como dije, no tiene el encanto del primero. La saga es bastante larga y la autora la continuó incluso más allá de Ana hablando de sus hijos, pero por ahora no voy a seguir con ella. |
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