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Olivia es la jovencita que en Click, gracias a su tía María, superó el conflicto de escoger entre permanecer siempre con el mismo grupo de amigos o hacer nuevas amistades con los nuevos amigos del instituto. Jovial, desinhibida, paciente con su hermano pequeño «cacahuete» (aunque a veces le puede la paciencia), comunicativa con su familia y con ganas de pasárselo bien, ahora Olivia tiene la suerte de ir a un campamento de verano. Y no lo hará sola. En las vacaciones de verano ella y su amiga de siempre Sara van por primera vez a un bonito campamento con un montón de actividades y chicos con ganas de pasárselo bien. Todo está muy bien organizado y el entorno es espectacular, a juzgar por el croquis del lugar que se incluye en el libro, y a pesar de que son las únicas chicas nuevas consiguen encajar. O al menos es Olivia la que se adapta con mucha facilidad, pero no es el caso de Sara. La mejor amiga de Olivia, Sara, no es tan extrovertida como ella y, además, está acostumbrada a estar rodeada de poca gente y le gusta dedicarse a actividades más tranquilas como leer o dibujar. Sin embargo, Olivia se aburre bastante con Sara y muy pronto se agota su paciencia, y también la de Sara que explota de la manera más negativa posible. Muy pronto, las dos amigas dejan de hablarse y se evitan. Poco a poco, todo va degenerando como en una bola de nieve y los monitores, una de ellas en especial, se dan cuenta de ello y lejos de interceder le dan algunas claves a las chicas para que reflexionen por ellas mismas. Es genial que estés ahí si necesita hablar y que quieras hacer cosas con ella… Pero si intentar animarla a ella te pone triste a ti, es solucionar un problema creando otro, ¿no crees? La escritora norteamericana Kayla Miller nos sorprende otra vez con una historia que nos revela las dificultades y conflictos que atraviesan los preadolescentes en su día a día. Para sentirse afortunados, no es suficiente contar con una familia, tener amigos y sus necesidades básicas cubiertas; nuestros chicos necesitan más. Si las vacaciones o verse rodeados de chicos de su misma edad parece algo fácil de llevar no lo es tanto y las personas tenemos personalidades bien definidas a edades tempranas. Las amistades y el hecho de encajar en un lugar nuevo son fundamentales para la felicidad de los más jóvenes y en eso radica nuestra postura. Por una parte, los adultos (tanto padres como docentes o mediadores) tenemos que estar presentes, pero no inmiscuirnos en las relaciones de los menores para que aprendan a solucionar sus problemas y no dependan tanto del resto. Esta espléndida novela gráfica nos sumerge de lleno en una problemática bastante frecuente como es la de hacer nuevos amigos y compartirlos con los que ya teníamos sin perder nada por el camino. Tampoco nuestra felicidad y autoestima. Además, las ilustraciones son preciosas y muy válidas porque muestran con todo detalle el entorno de los personajes y también captan muy bien las emociones de estos gracias a la atención en las miradas y las posiciones del cuerpo que combinan muy bien con el texto donde no sobra ni falta nada. Como dice la nota editorial: Mejores amigas y amigos nuevos, ¿cómo hacer que funcione? Suponemos que no es fácil, pero la verdad que la lectura de este libro será de gran ayuda. Enlace: https://www.culturamas.es/20.. |
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