La forastera

La forastera nos lleva a un pueblecito típico de la España vaciada en el que todo el mundo se conoce y sabe de quién eres y de dónde vienes. En esta pequeña localidad, Angie, una mujer en la cincuentena, regresa de Londres después de años allí y se instala en la antigua casa familiar. Rodeada de un ambiente hostil en el pueblo, solo tiene la compañía de sus perros y sus interacciones sociales de confianza se reducen a dos inmigrantes.

La forastera es un libro que transmite mucha soledad. Nuestra protagonista es una persona muy solitaria y tampoco es querida en el pueblo. Poco a poco va descubriendo una serie de secretos familiares que se remontan a generaciones y que están relacionados con algunos vecinos, todo ello acompañado de numerosos casos de suicidios a los que intenta buscar una explicación, pues todo en esta aldea andaluza parece estar conectado.

No es una lectura con la que haya conectado mucho, especialmente sus personajes, pero me ha gustado la narración y la ambientación rural en la que se desarrolla: las descripciones lugareñas plagadas de detalles, las descripciones del día a día y el lenguaje usado por sus personajes… Además, la autora trata temas importantes como el suicidio, la tristeza, la soledad, las raíces….y dota a la novela de un halo de intriga que hace que se convierta en una lectura interesante con la que descubrir los secretos mejor guardados de sus personajes.