Un esposo inconveniente

“Un esposo inconveniente” es la primera entrega de la serie Destino de Verónica Mengual. Cada libro tiene diferentes protagonistas, aunque a los masculinos los conocemos a todos en este, así que se pueden leer de manera independiente.

Viajamos a Crystal City, Texas, y al año 1885. En el Rancho Sarah Love conocemos a Sarah Lee Foster, una intrépida vaquera de veintitrés años. A pesar de su edad sigue soltera, y está al mando de su rancho y de una veintena de rudos vaqueros. al ser hija única su padre la preparó desde pequeña para el puesto. Cuenta con la ayuda de su capataz, Águila negra, y de su segundo al mando, Jeremy Andrews.

Me gusta Sarah Lee, no es una delicada damisela, y en la ciudad aguantan sus excentricidades gracias a que el Sarah Love es el rancho mas importante de la zona. Su papel independiente no es demasiado exagerado así que resulta creíble. También es leal y buena persona.

A Denver Harris siempre lo han tratado mal en el pueblo por su condición de bastardo. de niño trataba de llamar la atención de Sarah Lee de maneras poco acertadas, así que ella no lo quiere cerca. Tras cinco años de ausencia regresa al pueblo y el destino lo pone en el camino de Sarah. Su pasado y su carácter van a provocar un buen número de malentendidos, pero también es muy buena gente.

Una parte imprescindible del libro son los secundarios, en concreto tres vaqueros que tendrán su papel en esta divertida historia, y condicionarán el romance de Sarah Lee y Denver. Las interacciones del trio con Denver, y entre ellos, son estupendas. También con Sarah Lee, pero los cuatro juntos son brutales.

Águila Negra y Jeremy Andrews son algo más que empleados de Sarah, son una suerte de hermanos mayores postizos que quieren lo mejor para la chica. Y luego tenemos a Jack Lowell, el propietario de un rancho vecino.

La parte romántica es muy bonita, y la historia en conjunto muy completa, entretenida y fácil de leer. Tiene un buen número de escenas eróticas, pero bien integradas en la trama y ni cansan ni son excesivas. La novela tiene humor, romance, desacuerdos y peligros varios.

Me duró muy poco porque engancha un montón. Últimamente estaba leyendo poca romántica y necesitaba volver al género, y ni me pensé que libro elegir. Ha resultado ser una excelente elección y estoy deseando que llegue mayo para descubrir la historia de Águila Negra, el capataz mestizo del Sarah Love. Es la primera incursión de la autora en el romance del oeste, y le ha quedado una novela estupenda. Os animo a darle una oportunidad.