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Absolutamente fabuloso. Tengo una opinión bastante certera respecto de este, que sería el último libro que Mario Mendoza escribiría. Es un libro GENIAL. Así, sin más. Una novela llena de revelaciones, de recuentos, de críticas ácidas, de información, de investigación. Mario demuestra con este libro una fuerza narrativa descomunal, bestial, febril. Despliega a lo largo de la novela un arsenal investigativo absolutamente completo e interesante. Mario ha demostrado con este libro que los escritores se hacen a partir de la disciplina, del esfuerzo, de las noches de insomnio, del trabajo, ha presentado lo que para mí sería la cumbre de su trabajo como escritor. Y dicho sea de paso, no hay que olvidar que esta es, quizá, la última novela que vaya a publicar Mario Mendoza en su faceta como escritor de novelas. Jamás un libro me había hecho llorar, tenía ese récord como lector constante, pero Mario Mendoza llegó para perturbar y hacer trizas ese memorial. Me puso en jaque - mate con este libro. Las últimas 50 páginas me hicieron arrasar en lágrimas y en un llanto de profunda empatia y dolor ajeno. Mario Mendoza se consolida con este libro como uno de mis escritores favoritos. Toda mi admiración. |
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