Esta es una historia bastante divertida que se lee en un par de ratos. Candela ha de viajar a Estados Unidos por motivos de trabajo; allí se encuentra en un rancho tejano en el que ha de poner orden entre las vacas y en el dueño del tinglado. Ha estado bien en general, pero me hubiera gustado que las vacas tuvieran más protagonismo porque los capítulos en los que salen y se cuenta lo que ocurre son una auténtica locura 🤣🤣🤣🤣. Aparte de eso, todo sucede muy rápido para mi gusto y hay cosas un poco cogidas con pinzas. Sin embargo, la lectura está llena de situaciones que te harán reír o sonreír y otros momentos algo más duros en los que Candela lo pasa realmente mal, aparte de estar llena de romanticismo. Un libro que deja con una sonrisa en los labios y que es una pena que no dure un poco más. |