Con 𝘓𝘢 𝘨𝘶𝘦𝘳𝘳𝘢 entramos en la recta final de esta historia. Por un lado me da mucha pena que ya solo queden dos tomos y tener que despedirme de estos personajes, pero por otro lado estoy deseando saber como va a terminar la historia de esta peculiar familia y cuántos giros inesperados me faltan todavía por descubrir. En el cuarto volumen nos asomamos al albor de una nueva era para el plan Caskey y para el mundo. La II Guerra Mundial no dejará a Pérdido indiferente, y se crearán nuevas alianzas, surgirán nuevos secretos, estallarán otros, y la sangre correrá por las aguas del Pérdido. Cada vez me resulta más difícil reseñar estos libros sin desvelar nada de la trama y sin redundar en mi propio discurso. ¿Sigue siendo una historia entretenida? Si, mucho. ¿Sigue siendo adictivia y sorprendiendo? También. Ya lo sabemos. Blackwater nunca me decepciona. Sin embargo, debo reconocer que este tomo me ha resultado el más flojo de todos. A pesar de llevar un título tan bélico y sugerente, la realidad ha sido mucho más relajada que a lo que nos tiene acostumbrados esta familia. Resulta lógico. Con seis volúmenes de por medio alguno tiene que servir de transición y de tregua a tanto ajetreo. Además, superar a La casa... ¡era muy dificil!. 𝘓𝘢 𝘨𝘶𝘦𝘳𝘳𝘢 tendrá menos componente sobrenatural y predominarán las tramas cotidinas, pero sigue habiendo sorpresas y escenas bastante potentes y escabrosas. El día 3 de abril se publica La fortuna, y aunque voy con las expectativas más controladas, las ganas no me las quita nadie. ¿En serio que todavía no los estáis leyendo? 👻 |