Moxie

PONELE que al final remontó un poco, ero es un libro que siento que si no tuviera toda la campaña mundial de marketing detrás de "Es un libro super feminista", más de unx feminista lo hubiera criticado.Hay más de un momento donde parece que la autora se olvida de en qué época se ubica el libro: una época donde la conexión es masiva, las redes sociales y el internet ayudan a comunicar tanto, y decide realizar una diferenciación cuasi neanderthálica de las cosas: los varones al parecer recuerdan el uso de internet, y las chicas durante aproximadamente 400 páginas se olvidan que existen y deciden hacer manualidades (en la página 400 se acuerdan). El romance de este libro era algo evitable, no digo que innecesario, porque para cualquier libro juvenil es un poco necesario, pero si el hecho de que tuviera tanto protagonismo era evitable: tiene tanta importancia, y es tan cliché, que duele.En fin, Moxie es un libro que agarré con muchas expectativas, con todo un hype detrás que le jugó bastante en contra. Y si vamos a utilizar la palabra feminismo, que es una lucha por igualdad, la frase no debería ser "Es hora de pelear COMO UNA CHICA", sino "Chicas, es hora de pelear", ya que todxs peleamos de la misma manera.