Olimpia

Cuando esta novela cayó en mis manos pensé en la pereza que me dan las novelas sobre personajes o hechos históricos, dado que no es uno de mis géneros favoritos. Cuando ya llevaba diez páginas leídas había conquistado mi atención y mi interés.
La historia de “Olimpia”, uno de los diferentes nombres que tuvo la increíble madre de Alejandro Magno, nos adentra en una epopeya fascinante que me ha enseñado y formado sobre un pueblo y una sociedad que aún tenía inexplorada. Las luchas de poder, la ambición, las conjuras y los maravillosos vaivenes de la narración, maravillosamente llevado por la autora, no dejan tomar aliento al lector.
Me ha encantado la manera de narrar la historia en primera persona, desde el punto de vista de la protagonista, con lo que ello supone de personalización de sentimientos, vivencias y hechos y logrando esa cercanía con el lector que nos termina haciendo partícipes de los acontecimientos, que nos termina implicando casi como la propia Olimpia.
Me he sentido parte de esa esposa y madre. La autora ha conseguido generar una empatía cautivadora con la lucha de una mujer empoderada, inconformista y decidida a pelear por lo que creía suyo, aun teniendo en contra el devenir de la humanidad, la propia sociedad y, por supuesto, su género.
La descripción de los lugares y los hechos, donde se pone de manifiesto el conocimiento de la escritora, los geniales diálogos y la verosimilitud que aporta la narración de boca de la protagonista consiguen que el lector confíe en la historia y, como contraprestación, descubra un universo inmenso acerca de un personaje que, personalmente, no pensaba que fuera tan trascendente en el devenir del mundo.
He disfrutado de una obra que, sin dudarlo, me ha empezado a cautivar de cara a otras del mismo género.
Mi consejo es que busquéis un lugar cómodo, silencioso, aislado, casi como una isla desierta y os fuguéis con “Olimpia” para pasar un tiempo de lectura apasionado y que, sin duda, os atrapará el alma.
No dejéis de conocer la vida de “Olimpia” a través de las letras de Laura Mas, una aventura eterna y aleccionadora.