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En Valerya, donde la sangre de los Dioses corre por las venas de los nobles, Anna es una criada que tiene prohibido acercarse al fuego por culpa de Bastien Doyle, el hijo de sus señores, que estuvo a punto de morir quemado vivo. Lya Viride, que es una decepción para todos, intenta hacerse un hueco en el corazón de Bastien, aunque sigue soñando con príncipes azules. Sus destinos estaban escritos hasta que llega la noticia de la muerte del rey. Compré este libro sin saber de qué iba, sólo por el nombre de la autora, y Sangre de dioses me ha enganchado nada más abrirlo. Belén escribe de vicio, te traslada inmediatamente al mundo tan original que ha construido; me ha encantado la magia de esta novela, además de que hay giros argumentales prácticamente desde el principio. Tenemos tres perspectivas diferentes, lo que viene fenomenal (aparte de para conocer a los personajes) para saber más de un mundo que, como digo, está trabajadísimo y es de lo más novedoso. Todos los personajes están perfectamente perfilados. Belén les ha dado una personalidad propia tan única que sabrás quién está narrando sin necesidad de que se indique. Además, la trama no se centra únicamente en los tres protagonistas, sino que los secundarios también están muy desarrollados y rodeados de misterios que me han tenido pegada a las páginas. A pesar de la originalidad del worldbuilding, en parte la novela me ha retrotraído a mi adolescencia, donde en Wattpad triunfaban historias con magia elemental, y eso me ha provocado mucha nostalgia. Me ha encantado visitar un reino dividido en familias con dones propios, como se llevaba antes. Creo que hoy en día es difícil innovar en la literatura, pero Belén Martínez lo ha conseguido: Sangre de dioses le da un giro de tuerca a todo lo que he leído hasta ahora, además de que el estilo y el carisma de sus personajes te acabarán enamorando. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |
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