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Nos encontramos con una novela en la que cambia el foco del argumento. Si normalmente estamos acostumbrados a thrillers o novelas en las que la trama se centra en cómo resolver un caso, en Trata de testigos se centra en el punto de vista de la víctima. En esta obra no es tan importante la investigación de los hechos, es más, no la hay, se da por entendido. Por lo tanto, seremos testigos -nunca mejor dicho- de cómo se siente la protagonista, qué cambia en su vida y por qué. Con un inicio del libro que te hace subir la tensión para dejarte con la intriga. Poco a poco se irán desarrollando los hechos hasta saber el porqué del inicio. Un ritmo no muy elevado donde lo interesante es ir conociendo cómo va evolucionando la protagonista y con interés por saber cómo saldrá de esta; con varios momentos en los que se nos acelerará el corazón. Y junto a esto alguna que otra sorpresa inesperada. Una obra que nos ofrece una crítica a las relaciones tóxicas romantizadas mientras nos da pinceladas sobre la trata de personas. Pero también solidaridad y sobre todo, nos habla de amor en diferentes vertientes como la amistad. Sin meterse en profundidad en la dureza de esta lacra, nos acerca a una situación muy difícil. En cómo te puede cambiar la vida por un acto de amor a las personas y lo que supone para la protagonista este hecho. Hay alguna cosa que se ve venir y que para mi gusto, hace que el final quede, no diría forzado, sino algo conveniente. Algo que no deja de ser una apreciación personal y que a ti puede parecerte genial. Una historia que te atrapa, que se lee en un suspiro y en la que veremos una evolución del personaje que se ve envuelto en situaciones duras. Una obra con su crítica, sus frases para reflexionar, que se mueve entre el thriller y la contemporánea. Una obra que recomiendo para descubrir a la autora, y si ya la conoces seguro que querrás leerla de nuevo. Enlace: https://losmejoreslibros.top.. |
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