 |
Esta obra puede verse de dos maneras: como el prólogo perfecto de "Cien años de Soledad"; primer capítulo de "La mala hora"; una muestra de porque García Márquez es uno de los maestros indiscutibles del neobarroco hispano, junto con Lezama Lima o Alejo Carpentier. Abarco los primeros dos puntos porque todos los cuentos que se narran aquí están ubicados, ya sea en la ciudad caribeña de "La mala hora" o en Macondo, de hecho, se puede dividir así: Cuentos de la ciudad costeña: - Un día de estos - En este pueblo no hay ladrones - La prodigiosa tarde de Baltazar - La viuda de Montiel - Rosas artificiales Cuentos en Macondo: - La siesta del martes - Un día después del sábado (primera aparición de Rebeca, hermana del Coronel Aureliano Buendía). - Los funerales de la Mamá Grande. (Exponente de neobarroco moderno). Sobre la ciudad costera, creo que García Márquez asumió que todos sus lectores leerían "La mala hora"; o mejor dicho, creyó que todos los que leerían la mala hora pasarían sí o sí por "los funerales de mama grande" antes, cosa que arruina la experiencia por completo, pues si en estos cuentos ofrece un exponente maravilloso de obras cortas, en su novela se muestra como alguien que no sabe bordar bien la extensión lineal, incluso, en "Cien años de Soledad", aun se muestran estas carencias, pero eso es tema aparte. Continuando con los cuentos, en esta obra se abordan personajes maravillosos como al presidente y al dentista de la ciudad costeña, así como la viuda de Montiel o el herrero Baltazar, son personajes que por sí solos tienen una buena historia, pero que unidos en una gran narración no terminan de funcionar. En estos cuentos se aprecia más el sentido político de Márquez, pues en todos esos cuentos se aprecia el aspecto crítico hacia los gobiernos déspotas. Por otra parte, los cuentos ambientados en Macondo se centran en el aspecto ficcional, como por ejemplo cuando aparece el Judío Errante en el pueblo mítico, o cuando la señora llega a la hora de la siesta, en estas narraciones Márquez se permite explorar un poco más el mundo que estuvo construyendo desde "La hojarasca" para darle mayor profundidad, profundidad que se vería culminada con "Cien años...". Si gustan leer "La mala hora", entonces sí es imperativo leer este libro antes, si ya leyeron "Cien años", entonces amaran ver como se amplía su mundo con esta obra. |
>
