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¡Qué historia más bonita y emotiva! Tras un tono jocoso, se esconde una realidad muy triste y es que las personas mayores cada vez están más solos y necesitan a alguien con el que poder hablar. Hace unos días leía en el periódico 'La Vanguardia' este titular: «La mitad de ancianos con teleasistencia llaman para hablar “un ratito”». Soledad, el nombre de esta señora aunque también podría ser un sentimiento, quiere tener algún regalo para Navidad. Como su calcetín navideño es pequeño decide tejer uno, el problema es que se le va de las manos, se le va tanto que se pasa un año entero siguiendo el rastro de su calcetín para llegar a la punta. Mientras le acompañamos en su búsqueda, nos irá dando ideas de regalos y cuántos caben en su eterno calcetín (bolsos, monasterio, una ciudad, un planeta...). Cuando pierde toda esperanza, al fin cree hallar el final del trayecto aunque no del todo. Encuentra algo mucho mejor: el mejor regalo del mundo, no era nada material y nunca había caído en ello (¿qué será?). Así es como pasa su mejor navidad. |
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